Descubre el universo personal e íntimo de un escritor único y excepcional cuya vida, breve como un haiku, estuvo marcada por el amor a la escritura y el temor a la locura.
Nueva antología bilingüe de 70 haikus inéditos del genial escritor Akutagawa Ryūnosuke seleccionados, traducidos y comentados por Fernando Rodríguez-Izquierdo y Gavala.
Akutagawa Ryunōsuke, uno de los autores nipones más internacionales, llevó el relato japonés a las más altas cotas literarias con obras como Rashomon (1915), Vida de un idiota (1927). Estudiante brillante y ávido lector, fue también un consumado y prolífico poeta. A través de sus haikus podremos reconstruir el universo personal e íntimo de un escritor único y excepcional. Su poesía alcanza cotas sublimes a la hora de revalorizar las escenas más aparentemente insulsas de la naturaleza, logrando transmitir la honda esencia del haiku. Maestro de la palabra, el cromatismo de su poesía es vívido y fluido. A pesar de sentir una profunda añoranza por lo tradicional, Akutagawa supo ver con ojos de poeta los objetos modernos e incluirlos en sus haikus, insuflando aires nuevos a esta forma poética tradicional.
Akutagawa Ryunosuke (1892-1927) nació en Tokio en el seno de una familia burguesa. Desde niño desarrolló un apetito voraz por la literatura japonesa tradicional, que en la adolescencia compaginaría con la lectura de autores occidentales. Estudiante brillante, ingresó en la prestigiosa Universidad Imperial de Tokio y comenzó a publicar con éxito sus primeros relatos: «Rashomon» (1915) y «La nariz» (1916). Tras graduarse en la universidad en 1916 trabajó como profesor de inglés en la Escuela Naval de Yokosuka. En 1918 se casó con Fumi Tsukamoto y abandonó su trabajo para dedicarse en exclusiva a la literatura gracias a un contrato con el diario Osaka Mainichi. Comenzó una época de producción muy fecunda: «Lujuria», «El otoño» o «En la espesura del bosque». Tras un viaje a China como corresponsal en 1921, su salud, ya de por sí delicada, empeoró notablemente: insomnio, neurastenia, alucinaciones y un miedo cerval a la locura no le impidieron crear las que muchos consideran sus obras maestras: «Engranajes», «Kappa» o «Vida de un idiota». El 24 de julio de 1927, a los 35 años de edad, Akutagawa puso fin a la «vaga angustia confusa» que lo consumía ingiriendo una dosis letal de Veronal.
Gastos de envío gratuitos para península
Páginas: 160
Dimensiones: 175 x 115 mm
Encuadernación rústica con solapas
32 páginas | PVP: 10,00€