Nueva traducción de la obra maestra de Dazai.
"Indigno de ser humano" es la confesión de un genio refugiado en la soledad, la literatura y la autodestrucción, una novela formidable que trasciende lo literario para sondear lo metafísico.
Incluye las dos cartas que Dazai envió al premio Nobel Yasunari Kawabata.
Introducción y epílogo de Ednodio Quintero.
"Indigno de ser humano" es la obra maestra de Osamu Dazai, una novela inquietantemente personal que explora los abismos de un alma autodestructiva.
Su protagonista Yōzō, autorretrato crudo y revelador del propio Dazai, narra en primera persona las circunstancias de su vida desde su nacimiento en una familia de la aristocracia rural hasta su ruina y decadencia en Tokio. Un periplo vital que es un viaje sin retorno a través las sombras de la alienación, la adicción y la búsqueda incesante de identidad y que lleva a Yōzō por sombríos callejones, antros de mala muerte y sórdidos rincones de la ciudad para acabar hundido sin remedio en el foso de la autodestrucción.
Mientras Yōzō busca consuelo y comprensión en un mundo que le resulta a la vez indiferente e implacable, Dazai elabora una narrativa que trasciende fronteras y sondea con amarga intuición los temas universales de la desesperación, el aislamiento y la angustia vital.
La inquebrantable exploración de Dazai de la condición humana hace de "Indigno de ser humano" una obra atemporal que resuena en lectores de generaciones enteras.
Osamu Dazai (1909-1948) nació en el seno de una importante familia de Aomori, en el norte de Japón. Creció como un muchacho solitario e introvertido bajo el cuidado de su tía y de la nutrida servidumbre de la casa familiar. Dotado de un talento literario innato y una sensibilidad única, el joven Dazai se matriculó en el Departamento de Francés de la exclusiva Universidad Imperial de Tokio a los 21 años, pero nunca llegó a finalizar sus estudios universitarios. En la capital, Dazai, estandarte de la llamada «escuela de los decadentes», se entrega a una vida disipada de mujeres, alcohol y escritura. Excluido de la familia por convivir con una geisha y acuciado por las deudas, vivió sumido en un pozo de oscuridad, morfina y creatividad literaria.
Finalista del Premio Akutagawa en 1935 y 1936, sus relatos suscitaron el interés de la crítica, y le aseguraron un lugar destacado entre los jóvenes autores de la época. Tras varios intentos de suicidio y ser internado en un psiquiátrico en 1937, Dazai conoció un breve paréntesis de estabilidad al que contribuyó su matrimonio con Michiko Ishihara y el nacimiento de su hija.
Pero en 1945, retomó la espiral de autodestrucción que hasta entonces había caracterizado su vida. A pesar del gran éxito cosechado por sus novelas Indigno de ser humano y El ocaso, y sus relatos, Dazai puso fin a su vida en 1948 arrojándose al río Tama con su amante.
Páginas: 240
Dimensiones: 130 x 200 mm
Encuadernación tapa dura simil tela con cinta de seda
32 páginas | PVP: 10,00€